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FIESTA DEL FUEGO EN SANTIAGO DE CUBA

FIESTA DEL FUEGO EN SANTIAGO DE CUBA

 

Desde 1981, Santiago de Cuba celebra el Festival de la Cultura Caribeña, o mejor, esa gran fiesta popular tradicional que se conoce en toda las Antillas como el Festival del Caribe, y que es un verdadero derroche de fantasía, imaginación y sensualidad.

La música, las artes visuales, la literatura, el cine, la danza son algunos de los protagonistas de este escenario abierto, en el que confluye igualmente el pensamiento y la reflexión, síntesis del diálogo entre artistas, intelectuales y pueblo, unidos por raíces y etnias, las que pueblan la cuenca caribeña, con expresión hispana, inglesa y francesa, así como desde la sementera popular de los plurales dialectos, y especialmente, con la fuerza del créole.

Entre aquellos que se sumaron al encuentro, desde sus primeros años, están grandes figuras de la cultura caribeña como el musicólogo cubano, Argeliers León, el escritor barbadense George Lamming, el escritor y político dominicano Juan Bosh, la cantante haitiana Martha Jean Calude, el poeta brasileño Thiago de Mello el Premio Nobel colombiano Gabriel García Márquez , entre otros.

Una cultura mestiza, en la que convergen influencias de África, Asia, Europa y de los pueblos originarios, es la gran protagonista de este festival al que también asisten académicos, investigadores y agrupaciones artísticas, que se adueñan de las calles y de los teatros, de los más diversos espacios para el intercambio de vivencias, emociones y experiencias.

 “El Caribe que nos une”, es el tema de los debates, al tiempo que se producen en la heroica ciudad de Santiago de Cuba talleres de poesía, representaciones de la oralidad, teatro popular, ciclos de cine, espectáculos danzarios y musicales, y hay espacio para la religiosidad, que signa desde sus orígenes el universo mítico de la región.

Conocido también como “La Fiesta del Fuego”, el Festival, tiene el mérito de dar espacio a las plurales manifestaciones de los países insulares y también de aquellos del continente bañados por las cálidas aguas del Mar Caribe, siendo cada año, una de esas naciones la que recibe el tributo del pueblo santiaguero, y llega a la Isla con su arte y su cultura.

El XXVII Festival del Caribe, del 3 al 9 de julio, está dedicado a la República Dominicana, que participará con muchas actividades y estará representada por artistas del calibre de Sonia Silvestre, Víctor Víctor y Manuel Jiménez.

Es la segunda ocasión, (la primera lo fue en 1991) en estos 27 festivales, que se le rinde tributo a la hermana nación dominicana, tan particularmente entrañable para los cubanos, por lazos culturales e históricos.

La cultura popular dominicana participará en este 2007 con diversas expresiones que incluyen sus tradiciones culinarias, así como proyecciones etnográficas y antropológicas, muestra de su creación plástica y literaria y, con particular énfasis, estará presente la música, en sus distintos géneros, desde el merengue a la bachata y el reguetón.

Así como una expresión del audiovisual que permitirá al pueblo cubano aproximarse a la cultura y tradición dominicanas, de sus diversas regiones, desde la capital, Santo Domingo,  hasta Santiago de los Caballeros y El Cibao y el Gran Cibao.

 

ELISEO DIEGO, EL ENSAYISTA Y EL POETA

ELISEO DIEGO, EL ENSAYISTA Y EL POETA

Las Ediciones Unión nos entregaron un volumen de ensayos de Eliseo Diego, donde se reúnen textos más o menos conocidos del poeta, y otros de carácter inéditos que ahora se nos ofrecen gracias a la sensibilidad de su hija, Josefina (Fefé) Diego y que se conservan celosamente en los archivos de la familia.

No aproximamos así a otra vertiente de la escritura del autor de la Calzada de Jesús del Monte, no la de sus fábulas, relatos, cuentos e, incluso, simiente de aquel proyecto suyo de novela que no realizó, sino a la discursividad de la prosa reflexiva, en la que no peca el poeta que siempre está presente en toda su obra, de filosos o eruditos comentarios, porque la sustancia de tal volumen, como de esta papelería, está en el espíritu del diálogo que siempre se establece, y más cuando se trata de una sensibilidad e inteligencia como las de Eliseo, con la lectura de otros autores y de sus libros.

Eliseo Diego, como lo hiciera el francés Miguel de Montaigne, en los orígenes del género, deja libre a su imaginación, y sus criterios fluyen más allá de cualquier canon o preceptiva, cuando se acerca a un título, permitiéndonos el raro privilegio, y más en nuestros tiempos de áridas monografías que se apropian en exclusiva del llamado “ensayismo”, volar junto a él, y enriquecer con nuestra lectura la sensibilidad en la que afloran principios humanísticos.

Ajena al didactismo formal, no al sentido pleno de la didáctica, desde su magisterio Eliseo nos introduce igualmente en el campo de sus preocupaciones como cuando describió, en su etapa de docente, que sus educandos carecían de la posibilidad de traducir la palabra en símbolo, de alcanzar el cuerpo de la imagen y tal revelación le hizo dar un giro, abandonando el programa de la asignatura, para ayudar a aquella juventud a elevarse desde la letra impresa, y a gozar de la lectura como la potencialidad de creación de mundos, personajes y circunstancias, en una obra de ejemplar magisterio, sembrada la semilla de su fe en esas almas.

Ese enigma se adueñó entonces del verbo, como en los textos bíblicos, y Eliseo quien afirmó que “los mayores goces de la poesía están reservados para los hombres de corazón puro”, superó las manquedades del ego para contribuir a otra revelación, desde el libro y la literatura.

Quien como Eliseo se adentra, en las páginas de este volumen, en múltiples espacios y a la manera de los antiguos, nos devela los misterios, ya provengan estos del continente en las voces de juglares como Gabriela Mistral, César Vallejo, José Coronel Urtecho, Efraín Huerta o Carlos Pellicer, o igual que Lezama busque en las raíces propias, tras las huellas de José María Heredia, de Nicolás Guillén o de Onelio Jorge Cardoso, no sólo se ejercita en la lectura y en la escritura con la sapiencia de la experiencia y de las investigaciones, sino con el milagro singular de unos sentidos cultivados, de una emotividad enriquecida y enriquecedora.

Sin diferencias se adentra Eliseo en las lecturas y en los clásicos, y dentro del universo de la llamada literatura infantojuvenil descubre nuevamente a los hermanos Grima, a Hans Christian Andersen, galopa su imaginación desenfrenada tras la hermosura de un relato como La bella y la bestia, y salta en el espacio y el tiempo, supera los dogmas de los géneros, de lo popular y de lo culto, desde su propia autenticidad como poeta y como ser humano, vuelve a regalarnos la singularidad de su mirada sobre lecturas muy propias, y afines, como cuando escribe sobre Katherin Mansfield, deudor de su madre quien lo abrió a la lengua y a las letras inglesas, sin olvidar las raíces de nuestro idioma y de los clásicos, presentes en su poética.

Y llegan con Eliseo Diego las evocaciones de William Faulkner o de Robert Louis Stevenson, o el complejísimo proceso de traducir de una lengua a otra, como con los poemas del húngaro Sandor Petofi, mientras nos presenta el rompecabezas, el puzzle de su propio legado literario, ese que comenzó en el familiar imaginario de la quinta de Arroyo Naranjo, reservorio eterno de su infancia y de sus generosas utopías, las que poblaron las imágenes de sus poemarios y nutrieron ese mundo paradójico, imantado por su cristianismo, entre lo cotidiano y lo real, en el tejido del sonido y el silencio, en su juego lúdrico con el tiempo.

La lectura se puebla entonces por el sueño, y no hay horizonte académico que pueda ceñir la imaginación ni la fantasía de Eliseo, quien desde su natural modesto y sencillo teja como la araña ante nuestros ojos, un horizonte múltiple, que nunca se cierra y siempre queda abierto, como una invitación al otro, desde plurales perspectivas en las que siempre sobresale la subjetividad lírica.

BUSCANDO A ERNEST HEMINGWAY

BUSCANDO A ERNEST HEMINGWAY

Siempre agradeceré mi maestra de inglés, el amor que nos sembró por la literatura anglosajona, y cómo con sus desvelos intentaba que aquella rebelde muchachada que, entonces, concluíamos nuestra “Junio High School”, lograramos leer desde los cuentos de Chaucer hasta las narraciones de la llamada “generación perdida” en la literatura norteamericana.Gracias a su exigencia y sobre todo, a la buena dosis de utopía de su credo pedagógico, me adentré en la adolescencia del brazo de Hemingway, cuando intentaba adueñarme del estilo indirecto libre, en la escritura de su novela Adiós a las armas.Años más tarde, luego del trágico final de “Papa”, y cuando cursaba mis primeros años de Filología, en la Universidad de La Habana, tres amigos nos reunimos una mañana para buscar al verdadero artista, especialmente, íbamos con el afán de descubrir tesoros y secretos en su Finca Vigía.No teníamos mucho dinero, ni siquiera para alquilar un taxi, y en uno de nuestros vejestorios urbanos, en un ómnibus que más bien parecía testimoniar el período jurásico, llegamos hasta San Francisco de Paula, barrio suburbano de la capital, donde estaba su residencia, el hogar que él mantuvo durante varios años, en aquel parámetro de campesinos.Apasionados y vehementes, como si fuéramos alguno de sus personajes en medio de las selvas africanas, trepamos la cerca de piedras y saltamos por sobre las púas del acero para penetrar en secreto, y a espaldas de cualquier vigilancia, en aquel territorio vedado que estaba siendo preparado para convertirse en lo que es hoy, un museo dedicado a la memoria del autor de El viejo y el mar. Mas no fue con el patrón de su yate, el famoso Pilar que nos topamos aquellos tres adolescentes, sino con un miliciano al que logramos convencer, no recuerdo ahora con qué argumentos, y de enemigo se convirtió en guía, así pudimos entrar en la casa-vivienda, recorrer cada habitación, tocar sus libros y revistas, las máquinas de escribir ante las cuales lo hacía, cada mañana y descalzo, ir hasta la piscina en la que se bañó Ava Gadner, y curiosear incluso en el más preciado de aquellos escenarios, en la torre construida por el novelista, donde solía quedarse en solitario.Muchos años pasaron, y comencé a escribir. A vivir las mismas tensiones que un día padeció aquel gigantesco ser rubicundo, recordado por los hombres y los niños de San Francisco de Paula, con los que solía hablar de tú a tú, e incluso jugar al beisball.Varias veces visité la Finca Vigía, como también fuimos a Cojímar, y conversamos en la no menos célebre Terraza –el restorán al que solían llevarme en la infancia mis padres- con el viejo Gregorio, y con él remontamos el gran río azul, entre tiburones y furias, aunque de la retina jamás se ha ido la imagen de Spencer Tracy al incorporar a Santiago, sobre el esqueleto de su pez…He leído diversos acercamientos a la figura de Hemin…loas y elogios, como críticas estimuladas por la envidia y la mediocridad. Y he querido saber cuál fue su verdad, por qué escogió a esta Isla para vivir y escribir… No he encontrado, hasta el momento, indicios que testimonien sus vínculos con el mundo literario y cultural de esos tiempos.Sólo me hablan, desde el testimonio del recuerdo, nacido por el afecto y también nutrido por la leyenda, marinos y campesinos, gente simple, algunos que seguramente nunca leyeron sus libros, ni conocieron otro Ernest Hemingway que aquel hombrón de barba gris y piel rosada, enrojecida por el calor del trópico, que solía emigrar hasta la Habana Vieja y se perdía entre tragos de daiquirí, sin azúcar, al pie de la barra de El Floridita.Al principio me resultaba incomprensible esa especie de soledad, de retraimiento en medio de una ciudad tan populosa y alegre como lo fue La Habana en los 40 y los 50, la ciudad que nunca dormía y que comenzaba a vivir después de la medianoche.Pero ahora lo comprendo. Sé cuánto agradece un escritor, un artista, un intelectual el trato humano, donde no medien títulos, ni aplausos, ni status social ni reconocimientos. Cómo se fatiga el alma entre los que sólo hablan de literatura o de arte, e intentan filosofar las 24 horas del día. He descubierto gracias a Papa Hemingway el frescor de la inocencia, la cordial relación que se alimenta del cariño, sin necesidad de diálogos verbales. Sí, el americano no estuvo inmerso en las tertulias literarias cubanas ni participó de las batallas de sus élites. Él prefirió el trago de ron con su buen amigo y camarada Gregorio, tirar bolas y correr con los “fiñes” de San Francisco de Paula, gozar de la alegría íntima de recibir, a calzón quitado, a algunos amigos muy próximos, como esa Venus que se llamó Ava, o al grandioso Gary Cooper…y tomar con ambos daiquiri, mientras se articulaba en su mente alguna historia, como la de ese Santiago, que le llevó hasta el Nobel, cuya medalla vería yo, como tributo, en el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, en el poblado que está próximo a Santiago de Cuba.Un hombre como él, no necesitaba de amigos literatos… sólo de un buen amigo con quien charlar de peces azules, de carnadas, de anzuelos, y por qué no, del torso desnudo, de la cadera voluptuosa…de la piel aceitunada… de sus Islas en el golfo.

EN TIERRA DE ESPAÑA

EN TIERRA DE ESPAÑA

Resulta conmovedor, todavía y a la altura de siete décadas, la lectura del guión del documental Tierra de España, ("The Spanish Earth"),que dirigió el cineasta holandés Joris Ivens, en 1937, y en el que contó con la colaboración del escritor estadounidense Ernest Hemingway, autor del primer libro original, sobre el que bisturí en manos, trabajaría el realizador para crear esta síntesis de poesía y vida: “Hemingway me escribió una verdadera novela —larguísima— y se enfadó mucho cuando vio que yo empezaba a cortar páginas y páginas enteras. Lo que yo buscaba era evitar pleonasmos con las imágenes y encajar el comentario con los elementos visuales y sonoros, para lograr así un ritmo global en el montaje. Ernest acabó por comprender mis intenciones y aceptó los cortes.”Este documental, considerado como el mejor de los que se realizaron durante toda la contienda bélica, y que atrapó las imágenes de los primeros meses de la guerra civil española, cuando parecía aún posible el triunfo de la República, se presentó en julio de 1937 en algunos circuitos progresistas del medio intelectual norteamericano e, incluso, al entonces presidente Franklin Delano Roosevelt y a su esposa Eleonora, quien deseosa de saber cuál bando ganaría la guerra, escuchó de labios de Joris Ivens una contundente respuesta: «La República no ganará si ustedes siguen permitiendo que los alemanes y los italianos la abatan".Así como, también, se proyectó en Francia el 14 de abril de 1938 en medios de izquierda, y el 23 de mayo de 1938 se presentó por primera vez en España, a los combatientes republicanos. Después volvería a tener su “estreno” en la península sólo en el 2004, ya que había sido censurado por el franquismo.La idea original y la síntesis del guión, así como la dirección de aquel documental perteneció a Joris Ivens quien asumió, también, la fotografía junto a John Ferno, mientras la música, elaborada sobre piezas populares hispanas, estuvo a cargo de Marc Blitstein y Virgil Thompson, con el sonido de Irving Reiss, y la edición de Helen Van Dongen.Se realizaron varias versiones, del texto del narrador en off. Inicialmente la voz en inglés fue de Orson Welles, pero Ivens consideró que la declamación del actor no era adecuada para su estética, y pidió al propio Hemingway que leyera el guión en inglés, en la versión que ha quedado como definitiva, mientras que en francés contó con la participación del cineasta Jean Renoir y en castellano de Arturo Perucho, así como participaron, además, en la adaptación de la banda sonora, Rodolfo Halffter y Carlos Jiménez, al producirse el montaje de las lenguas extranjeras sobre el espectro sonoro del español que aparecía siempre como atmósfera en cada una de las secuencias.Con una duración de 54 minutos, concebida la acción dramática y el relato cinematográfico en tres planos paralelos: los combates en Madrid y la Ciudad Universitaria, así como en el frente del Jarama, en la defensa de la estratégica carretera que unía a la capital con Valencia y que era su única vía de abastecimiento, el trabajo de los campesinos para cultivar la tierra y proveer de alimentos a la zona republicana en la aldea de Fuentidueña del Tajo, y la historia individual de un joven miliciano, Julián, personaje simbólico que es también apoyatura para la estructura narrativa del argumento, se realizó este filme, hoy considerado un clásico, que fue producido por Contemporary Historians Inc. para Prometheus Picture Company, New York, 1937, con fondos reunidos por diversos intelectuales progresistas en los Estados Unidos, como Dorothy Parker, John Dos Passos y Lillian Hellman, entre otros.Con este documental los realizadores pretendían, al decir del propio Joris Ivens, responder a varias expectativas, unas de carácter inmediato y otras de naturaleza ética: “directa, política e ideológica, una acción inmediata y material para la compra de ambulancias y una acción histórica de testimonio para el futuro”. Sus objetivos fueron cumplidos, a pesar de la derrota republicana, y es una obra que trasciende por sus altos valores ideoestéticos y morales, que tras sus primeras proyecciones, en Hollywood, a las que acudieron algunas personalidades del cine, se recaudaron 16.000 dólares destinados a ayudar al pueblo y al gobierno de la República. Pero, lamentablemente, en aquellos tiempos del Código Hays, y también de la falaz política de “neutralidad” proclamada y adoptada por las potencias occidentales, el filme sólo fue exhibido en reducidos escenarios norteamericanos.También, y en su obra personal, este documental fue clave, al producir un giro en la propia estética de Joris Ivens, al ser la primera de sus películas de tema bélico: “fue la primera vez que vi soldados que sabían por qué luchaban”. Después vendría toda su monumental producción, la que había iniciado en la época del cine silente, con marcado acento formalista y experimental, y que enrumbaría, desde entonces, hacia un cine de compromiso social y político, como lo testimoniaron sus documentales sobre la guerra de Vietnam, China, y su propia participación en los momentos fundacionales del nuevo cine cubano, al que se incorporó con el aval de su prestigio, para convertirse en maestro de muchos de nuestros documentalista, desde septiembre de 1960, al tiempo que filmaría, en la Isla, dos de sus filmes: Carnet de viaje y Pueblo armado, ambas de 1961.La experiencia de la guerra civil española, contribuyó también al enriquecimiento de sus conceptos teóricos y de su praxis como realizador, deudor como era, de sus maestros, Dziga Vertov  y Robert Flaherty, para buscar en el género documental el testimonio de la realidad, dentro de una puesta orgánica, la que él llamaría “el documental organizado», sobre la base del rigor histórico, y del compromiso político. En aquella experiencia cinematográfica y humana, contó con la colaboración de Ernest Hemingway, uno de los mayores exponentes de la llamada “Generación Perdida”, quien ya no era aquel impulsivo joven que llegó a España, por primera vez, en 1929, para vivir la experiencia de los Sanfermines de Pamplona, en Navarra. Sino un hombre maduro, que en 1937 también llegaba a la península, en calidad de corresponsal de guerra, tempranamente identificado con la causa popular y las fuerzas de la segunda república, ideas que quedaron para siempre en las secuencias de Tierra Española,  así como en las escenas de su obra de teatro La quinta columna, en varios relatos y en una de sus más célebres novelas, escrita por cierto en La Habana, dos años después: ¿Por quién doblan las campanas?En los campos que rodeaban a Madrid, uno de los frentes claves del escenario de la guerra, estaba el equipo de realización de Tierra de España, que recorría, de un extremo a otro las trincheras, bajo el bombardeo de los “junkers” enviados por Hitler a Franco, y mientras se desarrollaba la batalla del Jarama, Joris Ivens

y  Ernest Hemingway, fueron acompañados muchas veces por jefes de las Brigadas Internacionales como Hans Dalile y Ludwig Renn.

La cámara de John Ferno captaba el testimonio vivo y directo de aquella confrontación armada e ideológica que se ha considerado como la antesala de la Segunda Guerra Mundial, y la primera resistencia histórica, en defensa de la Humanidad, ante el fascismo, en la que cayeron un millón de españoles, y junto a ellos, miles de combatientes internacionalistas, como los cubanos de la Centuria Guiteras y los estadounidenses del Batallón Abraham Lincoln.       .

RAFAELA DE CUBA

RAFAELA DE CUBA

En su juventud, cuando conoció a otra grande de la lírica, mujer de acento apasionado y fuerte, como Gabriela Mistral, Rafaela Chacón Nardi perdió su nombre, y ganó otro, gracias a la universal chilena, quien la llamó “Rafaela de Cuba”.

Y así recordamos a esa maestra, que siempre lo fue, dentro y fuera de las aulas, que superó los valladares de la vida, y de la enfermedad, las murallas del silencio que muchas veces hablan desde la ignorancia, y su propia soledad para multiplicarse, como lo hizo, desde el cristiano sentido del amor que es darse, y así nutrió y enriqueció el espíritu de cientos de niños en sus talleres, como en cada uno de los capítulos de su existencia creadora, también gracias a la palabra escrita en su condición de poeta, al ser –aunque nuestra torpe crítica e historia literaria no lo reconozcan todavía, como sucede con tantas otras manquedades- una de las más puras voces de la lírica cubana, dentro de los cánones del neorromanticismo.

La antología preparada por quien es una de sus mejores discípulas, no desde el cultivó de la poesía, sino como obra de vida y de creación, la ensayista Mayra Hernández Menéndez, quien además es una de las más autorizadas editoras de nuestro país, ha preparado esta cuidadosa selección de la poetisa Rafaela Chacón Nardi, Ámbito de amar, en la que se reúne una poesis, sustancia de un cultivado espíritu y de una también generosa encarnadura humana.

Y es que como Dulce María Loynaz, como Carilda Oliver Labra y Serafina Núñez, esta última tampoco valorada en su auténtica trascendencia, en la producción lírica de Rafaela está el amor como semilla, un amor que es encuentro y calidez, tristeza y amargura, deseo y realización, espiritualidad y carne, y un amor también expansivo a toda criatura viva, como lo demostró en su periplo por páginas como las de Viaje al sueño (1948 y 1957 en edición ampliada), Del silencio y las voces (1978), Coral del aire (1982), Una mujer desde su isla canta (1994) Vuelta de hoja (1995), Mínimo paraíso (1997) y Del íntimo esplendor (2000).

Mayra Hernández Menéndez, en su trabajo investigativo, como en sus valoraciones ensayísticas, y para materializar también un homenaje, reunió en este nuevo volumen de la Chacón Nardi su lírica de tema amoroso, ahora publicada por Letras Cubanas, institución que cuenta con esta laboriosa y profesional intelectual en su colectivo editorial, así nació este cuaderno que, al presentarse en la Feria Internacional del Libro, encontró masiva resonancia entre los lectores.

Y es que el amor, al que Rafaela calificaba de “misterio eterno”, “llama al viento” y de “júbilo secreto”, es fuente que apela a todas las generaciones y que encuentra eco en el latido de la especie, lo que demuestra también la necesidad de editar en nuestro país la obra de poetas y poetisas que se han expresado en esta cuerda, y que vencen los calificativos de la moda, desde la verdad de los sentimientos y la belleza del verbo.

CASTIGO Y JUSTICIA PIDE EL PUEBLO DE CUBA

CASTIGO Y JUSTICIA PIDE EL PUEBLO DE CUBA

DECLARACION DEL COMITÉ DE FAMILIARES DE LA VICTIMAS DE LA VOLADURA DEL  AVION DE CUBANA EN BARBADOS Compatriotas  En momentos que compartimos el profundo dolor con los familiares y el pueblo norteamericano, por el asesinato de los jóvenes estudiantes de la Universidad Tecnológica de Virginia, se produce la horrenda e insólita decisión del gobierno de los Estados Unidos de darle la libertad bajo fianza al connotado asesino y terrorista internacional Luis Posada Carriles.  Nos llena de indignación que este verdugo protegido por las autoridades norteamericanas regrese con toda la seguridad y garantías a Miami, guarida de terroristas que durante más de 40 años han cometido numerosos crímenes contra nuestro pueblo. Una vez más la sin razón y la impunidad, se impone a la razón, a la verdad y a la justicia.  La noticia dada a conocer ayer por los medios de prensa del mundo vuelve a enlutarnos y nos hace recordar los terribles y amargos momentos vividos en octubre de 1976, cuando aun niños perdimos abruptamente a nuestros familiares por el abominable crimen cometido por Posada y Bosch contra civiles inocentes al explotar una bomba colocada en el avión de Cubana de aviación en las costas de Barbados. Hoy queremos  alertar al mundo del peligro que representa que se encuentre libre el mayor asesino del hemisferio occidental.  Este repugnante verdugo fue reclutado y entrenado por la CIA para ejecutar horribles actos terroristas contra Cuba, junto al otro terrorista Orlando Bosch, quien se pasea libremente por las calles de Miami amparado por la amnistía que le concedió Bush padre cuando era presidente de los Estados Unidos. Luis Posada Carriles participó en la invasión de Bahía de Cochinos, en la Operación Cóndor, organizador y autor intelectual del sabotaje y explosión en pleno vuelo de la nave de cubana de aviación que costo la vida a 73 personas el 6 de Octubre de 1976. Ayudado por la CIA a fugarse de una prisión de Venezuela en 1985, se vinculó de inmediato a la guerra sucia contra Nicaragua. Notable narcotraficante, responsable del envió de drogas a los Estados Unidos. Prestó importantes servicios a la Fundación Cubana-americana con la  cadena de actos terroristas contra centros turísticos en La Habana en la década del 90. Tuvo una activa participación en planes de asesinatos contra nuestro Comandante en Jefe. La decisión de permitir que Posada Carriles esté libre en Miami es  la más clara demostración de la doble moral del  gobierno norteamericano, libera a un terrorista y mantiene en una injusta y cruel prisión a cinco luchadores  antiterroristas.  Los familiares de las victimas del terrorismo no podemos salir del asombro, ante tanto cinismo. El gobierno de los Estados Unidos se ha burlado de los acuerdos y tratados que le obligan juzgar a Posada Carriles como un terrorista. El 11 de Mayo, Posada comparecerá ante una corte acusado únicamente de mentiroso, que infamia, que burla a la opinión pública internacional, al pueblo norteamericano y a los familiares de las víctimas de los crímenes cometidos por este verdugo que de inmediato debe regresar a prisión, esa es nuestra exigencia. Nunca podremos olvidar sus desafiantes palabras  de que no se arrepiente de nada y  que si volviera a nacer, haría lo mismo. Cuando fue entrevistado sobre la bomba que ordenó detonar en el Hotel Copacabana y  que puso fin a  la vida de Fabio Di Celmo, sentenció con total  desprecio por la vida: el joven Italiano”se encontraba en el lugar y en el momento equivocado”. Esas palabras dichas por este celebre asesino, fueron inconcebiblemente repetidas por el Presidente Bush, quien al referirse  a los jóvenes estudiantes asesinados en la Universidad Tecnológica de Virginia afirmó que estos se encontraban en el lugar y en el momento equivocado.  Esta vigilia que comenzamos hoy es para alertar al mundo de la responsabilidad de la Administración Bush por la liberación y protección del terrorista Posada Carriles, para exigir que el verdugo regrese a prisión, que sea juzgado como lo que es: un connotado terrorista o que sea extraditado a Venezuela, no hay otra alternativa, los pueblos tienen ansias de justicia.  En este momento de indignación hace recordar el poema Pido Castigo del inolvidable poeta Pablo Neruda.  PARA LOS QUE DE SANGRE SALPICARON LA PATRIA,PIDO CASTIGO PARA EL VERDUGO QUE MANDO ESTA MUERTE.PIDO CASTIGO PARA EL TRAIDOR QUE ASCENDIO SOBRE EL CRIMEN.PIDO CASTIGO PARA EL QUE DIO LA ORDEN DE AGONIA,PIDO CASTIGO PARA LOS QUE DEFENDIERON ESTE CRIMEN.PIDO CASTIGO.   COMITÉ DE FAMILIARES DE LAS VICTIMAS DE LA VOLADURA DEL AVION CUBANO EN BARBADOS.  

FINA GARCIA MARRUZ, premio iberoamericano de poesía

FINA GARCIA MARRUZ, premio iberoamericano de poesía

Tiene 84 años de extraordinaria lucidez. Es en extremo tímida, aunque desde el silencio nunca ha dejado de escribir. Ni siquiera en los momentos de mayores dolores y desgarramientos. Se alimenta del amor, junto a su esposo, poeta como ella, Cintio Vitier, y de sus hijos, músicos los dos, Sergio y José María, y del enjambre de nietos y de nietas.

Fina García Marruz junto a Cleva Solís fue una de las dos musas del grupo Orígenes, ese que lidereó José Lezama Lima en la década de los años 40 del siglo XX para crear desde el reino de la imago otra realidad más límpida.

Ella es poeta y ensayista, y en ambos géneros goza de la excelencia, ajena a los elogios, ditirambos y a la vida social. Vive en su espacio más íntimo y como ayer y siempre nunca ha abandonado su fe en Dios.

Martí, el apóstol de la independencia de Cuba, el poeta es parte entrañable de la escritura y de la vida de Fina quien ahora recibe el Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda, sorprendida y escurridiza.

Es la primera mujer a quien se le otorga. La primera...y en estos momentos la voz más pura de la poesía cubana contemporánea.

Con Fina compartimos este júbilo y respetamos también la sincera palabra que brota de sus labios, en estos días de amor mientras la vemos cuidar de Cintio, y vivir el amor de todos los días, todas las noches...toda la vida.

JOSE MARTI EN LA HORA DE AMERICA

JOSE MARTI EN LA HORA DE AMERICA

A los 154 años de su natalicio, José Martí, el poeta y apóstol de la independencia de Cuba se multiplica en los pueblos del continente, en la hora de América y se expande por la geografía andina hasta llegar a Bolivia, toma las nieves y la costa del Ecuador, busca los volcanes y valles del istmo centroamericano en Nicaragua, y entre los llanos de Venezuela vuelve a escribir, con otros nombres, en este siglo que comienza, el XXI, aquel párrafo que faltó al poema de 1810, cuando los pueblos comenzaron a luchar por su libertad al grito del sable de Simón Bolívar.

Y habla en plurales idiomas, mientras altivo como la palma asciende las montañas, encuentra el arroyo de la sierra, y en Cuba reverdece el Maestro, imantado por el amor, la fe y la solidaridad humanas.

Mensaje a todos los seres humanos

Mensaje a todos los seres humanos

Comienza el 2007, y en medio de la violencia, el terrorismo, las guerras, el odio, el hambre, las enfermedades, el egoismo hagamos un alto, y nos sumemos al amor, la paz, la alegria, la fe, el dialogo, la amistad y la armonia en este planeta azul...

Feliz año con muchisima salud para todos y todas y el aroma de la mariposa que es la flor de Cuba, sencilla y tierna, fragil y hermosa, como la luz del sol

 

CHE VIVE

CHE VIVE

A PESAR DEL ODIO Y DE LA MUERTE

EL CHE GUEVARA VIVE

EN LAS ARIDAS TIERRAS BOLIVIANAS LOS CAMPESINOS LE PONEN FLORES Y VELAS

LE OFRECEN MISAS A DIARI AGRADECIDOS POR SU PROTECCION

AHORA ES SAN ERNESTO DE LA HIGUERA

Y SOBRE EL COSTILLAR DE ROCINANTE CABALGA DE NUEVO

 

¡NO AL FASCISMO!

¡NO AL FASCISMO!

Cuando se cumplen ya 70 años del asesinato de Federico García Lorca, una de las primeras víctimas del fascismo en la guerra civil española, debemos reflexionar sobre la realidad de este universo, sobre un mundo sometido a la barbarie, al terrorismo de estado, a la violencia y a la miseria.

En el medio oriente, sobre Palestina y el Libano estallan las bombas y mueren inocentes, niños, mujeres, ancianos y hombres... Iraq sigue bajo la ocupación norteamericana, y en muchos países la muerte es el único futuro que espera a la especie humana. Son días crueles y difíciles que recuerdan aquellos momentos del fusilamiento de Lorca.

Digamos NO... al fascismo, al fundamentalismo, a la guerra....y demos un rotundo SI por la vida, la justicia, el amor, y la paz.

Homenaje a Lezama Lima

Homenaje a Lezama Lima

Una de las voces más universales de las letras cubanas del siglo XX, el poeta, ensayista y narrador José Lezama Lima escribió y publicó hace cuatro décadas una de las obras más relevantes de la lengua, su primera novela, Paradiso, resumen de su poética y cántico de amor también a su país, a su cultura, con páginas que entonces, en 1966, resultaron audaces y polémicas, desde la aprehensión de la sexualidad, en las que sobre todo encontramos otra mirada desde la eticidad profundamente humanista de su autor.

Hace igualmente tres décadas que, en 1976, diez años después de la edición príncipe de aquella novela, considerada en las encuestas académicas, uno de los cien mejores libros de la pasada centuria a escala planetaria, falleció en la ciudad que también lo vio nacer, el 9 de agosto.

Y en homenaje a su obra, a la intensidad de su escritura, al caudal de su espiritualidad escribo estas líneas a manera de tributo, desde el agredecimiento y la deuda con quien fue el ego fecundante de aquella extraordinaria generación, la del grupo Orígenes.

España en el corazon

España en el corazon

En este mes de julio se conmemora el 70 aniversario del inicio de la guerra civil española que dejo mas de un millon de victimas.

Muchos de nosotros tambien somos hijos y nietos de aquella contienda, y en nuestros corazones laten todavia las voces de quienes murieron, en la peninsula y en el exilio.

Tres grandes poetas de America cantaron al pueblo español, entonces, bajo la bandera de la republica: el chileno Pablo Neruda, el cubano Nicolas Guillen y el peruano Cesar Vallejo, porque tambien en aquella batalla, antesala de la Segunda Guerra Mundial, cayeron los heroicos miembros de las Brigadas Internacionales,  como los combatientes cubanos de la Centuria Guiteras.

Amor y gloria a los caídos, y amor y paz para España y el mundo 

 

 

Juan Ramon Jimenez entre nosotros

Juan Ramon Jimenez entre nosotros

La huella de ese andaluz luminoso que se llamó Juan Ramón Jiménez es profunda en Cuba. Todavía se le recuerda, agudo, sensible y algo irónico en aquella ciudad de La Habana de 1936 que lo acogió con entusiasmo.

Como la cultura cubana se considera su deudora, por haber preparado en aquel año aciago, el mismo del inicio de la guerra civil en la península, una de las más importantes antologías de la entonces joven poesía de la Isla.

Ahora, y en ocasión del medio siglo de su premio Nobel y, sobre todo, de los setenta años transcurridos de su llegada a la mayor de las Antillas, se realiza un documental, mediometraje de 52 minutos, de una directora, Mrina Ochoa articulado desde la memoria con entrevistas a dos de las más relevantes personalidades de las letras cubanas, unidos en el verbo y la vida: Fina García Marruz y Cintio Vitier.

Así Cuba se dispone a honrar a Juan Ramón y se suma al entusiasmo de los iberoamericanos, conmovidos por el talento y la sensibilidad de aquel hombre que también, en los días dolorosos de la guerra, encontró amor y paz, mucha amistad y respeto en tierras americanas.

Presencia de Jose Marti

Presencia de Jose Marti

No hay cubana ni cubano que no sienta, en el aire, la presencia del Apóstol José Martí en este mes de mayo, y especialmente el día 19, día aciago de su caída, como él mismo lo predijo en sus versos, de cara al sol, en los potreros donde se cruzan los dos ríos, el Cauto y el Contramaestre por las tierras orientales de Jiguaní.

Fue el cruce de la espada y de la pólvora, y la hierba de Guinea que cubría los bosques cubanos, allá por 1895, el escenario de aquel combate a mediodía, cuando él también comenzaba a vivir el sueño de toda su vida: luchar por la independencia y la libertad de Cuba.

En el ideario ético de la Revolución, la misma que comenzó en 1868 con la liberación de los esclavos por el hacendado Carlos Manuel de Céspedes, está la semilla martiana, como diría Lezama Lima, porque siempre será el misterio que nos acompaña. 

José Lezama Lima, en la memoria

José Lezama Lima, en la memoria

Por esas paradojas del destino, en este año 2006, Lezama Lima protagoniza el espacio literario cubano. Y es que hace ya 40 años que fue publicada su novela Paradiso, obra cumbre no solo de las letras en Cuba, sino una de las piezas más totalizadoras escritas en el idioma español en el pasado siglo XX.

También, el próximo 9 de agosto se cumplirán 30 años de la muerte del gran poeta y ensayista cubano, quien desde los años 40 de la pasada centuria, encabezó el movimiento más renovador de las letras cubanas desde la modernidad, me refiero al grupo Orígenes.

Hombre de fe cristiana, católico como muchos de sus amigos y camaradas de letras y de vida, fue también un habanero universal, amoroso de su tierra y de sus tradiciones, como lo mostraba desde el Habano que poblaba sus noches y sus días desde la casa de Trocadero.

Dueño de la lengua, explorador de todas las potencialidades de la palabra humana, metafórico por esencia en la estructura del espacio vital y del imaginario, Lezama ha vencido a quienes una vez, desde la envidia y la miopía espirituales, intentaron reducirlo cuando no desconocerlo.

Él está entre nosotros, para siempre, como las palmas.

LA AMERICA DE JOSE MARTI

LA AMERICA DE JOSE MARTI

La vida privilegió el talento de José Martí. Su propia experiencia avaló el desarrollo de sus ideas. Y aquel joven que partió al destierro, en plena adolescencia, para espigar en la metrópoli española, amplió precisamente el referente histórico de la independencia de Cuba en el diálogo fecundo que protagonizó durante su estadía en otras naciones de América como México, Guatemala y Venezuela.

Se insertaba la Isla amada no sólo en la contextualidad geográfica de las Antillas y el Caribe, sino en el universo de lo que él, desde entonces, comenzó a nombrar como “nuestra América”, ese territorio, esa comunidad de intereses, etnias, tradiciones, culturas e historia que se expanden desde el Río Bravo hasta la Patagonia.

Nacido en los primeros años de la segunda mitad del siglo XIX, José Martí vive también la experiencia de la construcción de la Modernidad, durante los tres lustros de su exilio en los Estados Unidos, mientras el país emergía de la guerra civil, abría su espacio a miríada de emigrados, y avanzaba tecnológica, cultural, socialmente hacia la era de los monopolios, el capital industrial y el potencial financiero que lo convertirían, en la próxima centuria, en una potencia a escala mundial, particularmente significativa en el desarrollo histórico de los pueblos de América a los que veía como su “traspatio natural”, en la política expansionista del imperio.

Ambos horizontes permitieron al cubano José Martí convertirse en el continuador legítimo del ideario bolivariano, ante las nuevas realidades de la historia política, económica y social del trasvase entre el siglo XIX y el XX.

Desde su sensibilidad humana, avalada también por su condición de artista, de poeta, puede Martí revisitar el pensamiento de Simón Bolívar y de los próceres de la independencia, y construir un proyecto que, desde la independencia de Cuba y Puerto Rico, se traduzca en aquella estrofa que, para él, faltaba en el poema de 1810.

Así, el latinoamericanismo martiano, deudor del bolivariano, aborda en medio de la emergencia del imperialismo norteamericano, las perspectivas de desarrollo de los pueblos de nuestra América, como parte indispensable del equilibrio del mundo, teoría política que trasciende su época y cobra mayor vigencia en nuestros días.

Los valores propios del llamado por él hombre natural, del proceso histórico de la construcción de las identidades, la cultura como manifestación de las esencias y no de las apariencias, en defensa del perfil auténtico y con mirada orgánica, nunca mimética ni dependiente, se manifiestan igualmente en el proyecto martiano de una América otra.

Su presencia en las sesiones de los congresos realizados en Washington, donde se gestó la política expansionista del panamericanismo en el área continental, y su temprana defensa del diálogo, de igual a igual, con todos los pueblos y naciones del mundo, como vía de desarrollo, avaló también la formación de esta doctrina política profundamente revolucionadora, que se asienta en las necesidades históricas de América Latina y el Caribe, en la que cual los pueblos del subcontinente encuentran, todavía, respuesta a sus propios y complejos problemas.

Cuba, América Latina y el espacio más abarcador que él calificó como Patria, al afirmar que “Patria es humanidad” permitieron al genio político de José Martí adelantarse a sus coetáneos, en el diseño de un programa liberador que no se limita a esquemas ni fórmulas superestructurales, sino que se desplaza hacia el corpus de la historia, en toda la diversidad manifiesta entre los pueblos latinoamericanos y caribeños, insertos en el contexto mayor de la especie humana como destino.

Uno de sus textos más lapidarios, el conocido ensayo Nuestra América, así como sus discursos sobre Bolívar y el nombrado Madre América, pronunciados por José Martí en la Sociedad Literaria Hispanoamericana, en Nueva York, responden a una línea de pensar complejo, de profunda médula dialéctica que se apropia, por la vía epistemológica, de la historia y la somete a una demoledora crítica desde el análisis de todos y cada uno de los períodos, desde las culturas aborígenes hasta la colonia y la república.

Hombre de su tiempo y de todos los tiempos José Martí supo articular un proyecto de cambio, profundamente enraizado en los acontecimientos y sucesos de la historia latinoamericana y caribeña, bien conocidos por él y sometidos también a un pensamiento crítico, en el que se manifiesta además la apropiación del legado filosófico de su época, no para emular con este ni para aceptarlo pasivamente, sino como instrumento de estudio, siempre adecuado a las propias realidades políticas, económicas y sociales de nuestra América.

Quien como José Martí se manifestó en múltiples esferas de la vida, desde la creación literaria al periodismo y a la acción política, al organizar y preparar un programa y una acción revolucionaria que condujera al pueblo cubano a la última guerra de independencia, pudo construir su teoría y dar énfasis práctico, desde la apropiación también legítima de la experiencia histórica de las naciones y culturas de América Latina.

Es desde esta mirada suya que José Martí nos lega un pensamiento dialéctico, coherente y complejo que responde no al voluntarismo sino a las demandas y urgencias de la propia historia de América y del mundo, y la propia vida lo ha demostrado, como en el pasado siglo XX, en el cual, como en estos primeros años de nuestra centuria, las líneas de la política martiana resplandecen no como utopías infranqueables, sino como propósitos realizables a favor de las masas más humildes, y populares, que no conocen todavía, y a pesar de la independencia formal de nuestras repúblicas, de la justicia social y de la cultura.

 

A MIS CALLES DE LA HABANA

                                                                              a Bella

Calles de la Concordia y la Amargura,

de Peña Pobre y Soledad, urgidas

de cal y brusco sol, perdidas

colmáronme las horas la estatura;

hermanas todas de la calle pura,

la más feliz de cuantas ya son idas,

en Roma y Cuzco y las demás que olvidas

tan pronto tú, memoria eterna, oscura;

es a vosotras que agradezco el día

que dio lumbre a la joven que es ahora

la mejor parte de la vida mía;

y aunque el vago crepúsculo desdora

vuestros muros y ya la tarde es fría,

mi lucecilla os salva y enamora.

                                                ELISEO DIEGO 

 

13 DE MARZO

13 DE MARZO

Acababa de cumplir los 12 años. Recuerdo que ese día no fui a la escuela. Y, horas más tarde, llegó la noticia a mi hogar: José Antonio Echeverría y los estudiantes habían asaltado el Palacio Presidencial para ajusticiar al tirano Batista.

También fue el nerviosismo, la tensión de mi familia y los vecinos. Después vendrían las lágramias de mi madre al saber de la muerte de José Antonio, de "Manzanita", al costado de la Universidad de La Habana...

Y los recuerdos de mi mamá, cardenense como el mártir...a quien de pequeño había tenido en sus brazos, por lazos de amistad con su madre, Conchita Bianchi y con su padre, Sinforiano...

Pasaría mucho tiempo, muchos años, y una tarde fui hasta la casa natal de José Antonio, recorrí las habitaciones, contemplé los objetos personales, un cuadro que quedó a medio camino, sin concluirse la pintura...

Fui estudiante universitaria, subí y bajé muchas veces la Colina, como llamamos los habaneros a la sede de la escalinata, el corazón de la juventud cubana, el sueño de tantos...y deposité flores donde aquel joven de 27 años cayó con el deseo de hacer a Cuba libre...

Cada 13 de marzo lo recuerdo también, y consagro un espacio muy cálido para su memoria, el que compartí con mi madre, y el que todos en esta Isla le dedicamos a aquellos jóvenes valerosos y nobles que entregaron su vida con verdadero patriotismo...

 

AMOR VIDA Y PAZ

AMOR VIDA Y PAZ

En muchos países del mundo se celebra el 8 de marz como el Día de la Mujer. y en una ocasión como esta quiero detenerme a reflexionar sobre el amor, la vida y la paz, sin los cuales no podría existir el género humano.

Culturas, razas, ideologías, religiones diferentes pueblan el planeta, pero hay sentimientos comunes que se comparte, desde el corazón de una madre, de una hija, de una hermana, de una esposa, de una amiga, y es el reclamo de paz para la especie, de trabajo y salud para que se produzca la vida y haya menos lagrimas y dolores.

La Humanidad al parecer ha avanzado mucho en terrenos científicos y tecnológico, mas no así en el aspecto del diálogo, del entendimiento, de la tolerancia y sobre todo, de la aceptación del otro, del respeto a la existencia del prójimo, desde la propia y legítima razón de la vida.

Pienso en los millones de víctimas que mueren, todavía, en campos de batalla, en centros de encarcelamiento y tortura, como también pienso en los millones que sufren frío, hambre, y carecen de atención médica y de escuelas...

No puede hablarse de civilización en medio de tanto egoísmo. Por eso les envio desde esta página un mensaje de amor y de fe, un apelativo a defender la paz contra la guerra, en todos los países, continentes, islas...

El amor, sólo el amor es vida, y para que el amor fructífique necesitamos de paz.